CRESPILLO llegó a La Madriguera con la boca en un estado lamentable. Sus incisivos inferiores le sobresalían de la boca, además de estar tan aterrado que, sin llegar a tocarle, comenzó a chillar y a patalear. Necesitó cirugía oral para extraerle los incisivos, pero puede hacer vida normal.
Necesita limpieza a diario de los oídos con gotas y un pequeño masaje. Quizás en el futuro necesite cirugía en los oídos, pues tiene los conductos muy deformados y por eso se le acumula tanta cera. Necesita que le limpien los ojos a menudo porque le lloran por los problemas dentales. Necesita tratamiento renal a largo plazo, quizá de manera crónica.
Por todos estos cuidados y los gastos que puede generar hemos decidido hacernos cargo de él de forma permanente.