ALONDRA llegó a La Madriguera junto con otras cinco hámsteres más, todas ellas procedentes de un criadero de animales donde vivían en condiciones muy precarias. Ha tenido una vida difícil, pero a partir de ahora todo será bueno.
Alondra es una hámster confiada. Desde el primer momento se ha dejado coger, acariciar y comer de la mano. A pesar de haber pasado por un infierno, confía en los humanos. En cuanto te escucha sale a llamarte para dar su paseo y cotillear, que le encanta. Devora toda fruta y verdura, no puede haber mejor compañera.