POLVORÓN malvivía en una minúscula jaula de pájaro y le alimentaban a base de alpiste, no sabía lo que era estirar las patas, saltar, ni conocía el heno o la verdura fresca. Llegó empapado de su propio pis, lleno de nudos y porquería en la zona de los genitales. El pobre olía bastante mal.
Polvorón además de ser muy guapo y esponjoso, es un conejo activo y curioso. Al ser un conejito de pelo largo y fino, necesita cepillados frecuentes para evitar que se formen nudos en su esponjoso pelo. Tiene un pelazo, es precioso y original. Su pelo es la excusa perfecta para pasar toda la tarde junto a él peinándole y dándole mimos. Es juguetón y curioso, siempre animado. Con la carita de bueno que tiene seguro que perdonas si hace alguna bolita fuera de la bandeja al llegar a un sitio nuevo para marcar el territorio.
Es un conejo único, espectacular, que se merece una vida llena de cariño y cuidados porque es capaz de devolver con creces ese amor y hacer feliz a cualquier humano. Merece una hogar maravilloso, donde pueda disfrutar del amor que le han negado hasta ahora.