DAWN fue rescatada de una perrera llena de mordiscos de otros conejos y heridas. Le faltaba pelo en casi todo el lomo y lo tenía inflamado de los mordiscos.
Tras las curas y un buen rapado en un par de zonas donde tenía nudos enormes, se ha quedado tranquila. Cuando la recogimos se hacía una bolita de lo asustada que estaba, por suerte en un par de días está mas tranquila.
Es una coneja preciosa que se está recuperando muy bien, esperemos que encuentre familia con la misma rapidez.